Un año amargo, pero muy musical
Recientemente, dejamos atrás un año cuanto menos extraño, plagado de noticias amargas como corolario de la pandemia mundial por Covid-19, pero también un fin de década muy prolífico en el ámbito musical. Hacemos un repaso de 2020 a través de los cambios y continuidades de la música en todo el mundo.
Hace unos días dábamos la bienvenida al 2021, celebrando que dejábamos atrás un 2020 cargado de sucesos fuertemente marcados por la pandemia, esa que todavía sigue poniendo en riesgo la vida de millones de personas en todo el planeta. Sin embargo, esta realidad, pese a haber impactado en muchas más esferas de la vida humana de las que podíamos imaginar, no debe empañar otra bien distinta: el prolífico desarrollo de la música en 2020.
Porque si algo ha caracterizado el año twenty-twenty es la inconmensurable cantidad de piezas musicales compuestas y publicadas a lo largo de esos 365 días, unida a la calidad de estas obras, tanto a nivel nacional (si ponemos el foco en la música en España) como internacional. Pero la evolución y carácter de ambas esferas han sido bien distintas, en parte por la forma en que la pandemia por Covid-19 ha incidido en cada país del globo.
Por esta curiosa capacidad que ha tenido la música de reflejar el contexto social imperante, merece la pena hacer un repaso del año 2020 desde sus inicios.
MARZO
Este tercer mes del año se tornaba crucial para todo el globo: el coronavirus que meses antes aparecía amenazando a China y al continente asiático se extendía por el resto de regiones, llegando en Europa a ser especialmente virulento en Italia.
Pronto llegaría a España y con él el anuncio del estado de alarma por parte del gobierno el 13 de marzo, produciéndose un choque entre el tipo de música que se estaba haciendo en nuestro país durante este mes intenso de cuarentena y aquella que se proponía más allá de nuestras fronteras. La diferencia es verdaderamente abismal.
Los cantautores españoles optaron por transformar su creatividad en magistrales letras vinculadas al compromiso social, a la necesidad de permanecer en casa y elogiando en todo momento la labor de los profesionales sanitarios, a quienes-conviene no olvidar-aplaudíamos cada día a las 20:00 h. desde nuestros balcones y terrazas. Se diferencian por tratarse de canciones aisladas, sin aspiración a conformar el setlist de ningún disco. Nacieron como fotografía social de aquellos meses y para aliviar el sentimiento de soledad que azotó al mundo entero.
1. Los abrazos prohibidos de Vetusta Morla
Siendo una colaboración de más de 20 artistas españoles, esta canción recoge la esencia de la urgencia sanitaria que padecía España. Casi un año después, algunas de las líneas de este tema sigue rebotando en nuestras mentes, cobrando incluso la misma vigencia que entonces.
«Por los que hacen del verbo cuidar, su bandera y tu casa. Y luchan porque nadie muera en soledad»
2. La buena sombra de Izal
El grupo de indie Izal se adelantaba a sus compañeros de Vetusta Morla y publicaba una canción grabada íntegramente en las respectivas casas de los cinco integrantes. Todos lograron materializar la maqueta propuesta por el vocalista y compositor de la banda, Mikel Izal, y el resultado no puede ser más fiel a su estilo ni más coral, como ya queda ilustrado en la miniatura del videoclip.
«Y ser mejores cuando volvamos»
3. Barrer a casa de Sofía Ellar y Álvaro Soler
Ellar y Soler aprovecharon el confinamiento para componer conjuntamente y pasar un tiempo de pareja que sus ajetreadas agendas no les permitía disfrutar. Así nace Barrer a casa, un canto a la libertad y a la esperanza de una vuelta a la normalidad.
«Ahora Madrid se nos viste de fantasma, a las ocho caen las redes, se llenan las terrazas»
Tampoco faltaron las contribuciones de compositores de renombre...
4. Prisión esperanza de Manuel Carrasco
Las letras del onubense siempre se han caracterizado por su profundidad, unidas a la inconfundible voz y acento del cantautor andaluz. Esta vez no sería menos y Prisión esperanza da buen cuenta de ello.
«Qué importancia tiene ahora lo perdido y lo ganado. Las cartas están boca arriba y el mundo está boca abajo»
5. El mundo afuera de Alejandro Sanz
Revistiendo siempre la realidad de una pátina romántica, Sanz, que carga a sus espaldas con 32 años de carrera artística, nos deleitaba con esta canción que podríamos hacer encajar en un género que coloquial y colectivamente hemos denominado «amor en tiempos de pandemia», recordándonos a la obra de García Márquez El amor en los tiempos del cólera.
«Sé que cuando pase todo esto, tú y yo volveremos a ser como éramos antes»
6. Calma de Coque Malla
En 2019 salía su disco ¿Revolución?, irreprochable por sus ritmos discotequeros y viraje al género funky. Pero en 2020 nos sorprendía con esta llamada a la Calma, un registro sin duda opuesto al que el madrileño venía ofreciéndonos.
«Gente peleando con el miedo, paciente y resistente, viajando con la mente, deseando un momento diferente»
7. Un canto a la vida de Vanesa Martín
La malagueña fue posiblemente la más rápida de sus compañeros, ya que a finales de marzo regalaba al mundo este canto a la vida. De nuevo, valores como la esperanza y la certeza de un futuro mejor son recogidos en esta canción solidaria que Vanesa Martín compuso para Cruz Roja. La recaudación se destinó íntegramente a la causa pandémica, un síntoma certero del poder inconmensurable de la música.
«Algo nuevo nos espera. Quedan tantas cosas bellas que alcanzar»
La música internacional siguió incuestionablemente otro rumbo. Dos discos clave para el año 2020 vieron la luz en el mes de marzo: After Hours de The Weeknd y Future Nostalgia de Dua Lipa.
Con su single Blinding Lights, el cantante canadiense The Weeknd (Abel Makkonen) se sitúa el primero en los ránquines de canciones más escuchadas durante el 2020. Por su parte, la cantante británica con raíces albanokosovares Dua Lipa se revelaba como promesa del año. Future Nostalgia es un disco de pop que recupera ritmos ochenteros. Y a sus seguidores parece haberles encantado. Sin duda, la gira que la joven de 25 años prevé retomar este año apunta a ser un espectáculo en toda regla.
En España, el cantautor, aunque también reconocido pintor y director de cine, Luis Eduardo Aute fallecía el 4 de abril ante la triste mirada televisiva de todos los que admiramos su obra, entre las que destacan canciones épicas como “Las cuatro y diez”.
Fue un día para rememorar su grandiosa contribución a la canción de autor de nuestro país, pero también un día para olvidar por la triste noticia.
ABRIL
"Trae a los cortadores de cadenas", esta vendría a ser la traducción del primer disco de estudio que Fiona Apple publica después de ocho años. Estaba disponible en plataformas digitales el 17 de abril.
Coindicen los oyentes y críticos musicales en que Fetch the Bolt Cutters bien podría considerarse el disco paradigma del 2020. La estadounidense lo compuso durante los meses de confinamiento con herramientas caseras y, pese a no existir un consenso sobre la estética que presentan las canciones (a medio camino entre la voz hablada y cantada) nadie discrepa sobre la profundidad de este 5º álbum de estudio, un viaje por el mundo interior de Fiona Apple.
MAYO
El rapero canadiense Drake presentaba su mixtape Dark Lane Demo Tapes que le serviría a modo de tráiler para anunciar algunos de los temas de su próximo disco, cuya publicación está planeada para este año. Asimismo, Lady Gaga, tras cuatro años de parón musical, lanzó sus sexto álbum de estudio, Chromatica. En él, se incluían colaboraciones con Ariana Grande o su amigo Elton John, siendo especialmente reseñable el dueto con la primera en la canción Rain on me.
JUNIO
El 9 de junio de 2020 fallecía Pau Donés, vocalista del grupo de rock español Jarabe de Palo. Nos dejaba a todos al comienzo de un verano diferente tras luchar, no con poca fortaleza, contra un cáncer de colon, avivando entre la sociedad española una nostalgia repentina que hizo colapsar las redes con mensajes de cariño, despedida y una buena dosis de tristeza, pero también de mucha esperanza y alegría por el legado musical tan rico que el catalán nos dejaba.
JULIO
Un bosque de altos árboles en blanco y negro, así es la portada del 6º disco de Taylor Swift. La compositora nacida en Pensilvania ha demostrado con este disco (que de sorpresa salía publicado el 24 de julio de 2020) su madurez profesional y personal tras más de quince años de carrera musical, no quedando exento este álbum (de nada menos que 16 canciones y un bonus track) de apelaciones a la introspección, al amor verdadero y de historietas que con tanto ingenio configuran la discografía de Swift, como The Last Great American Dinasty o Betty.
AGOSTO
Llegó el verano y con él una relajación de las medidas sanitarias que con tanta contundencia habíamos logrado respetar meses antes. En cambio, el panorama musical se vio desierto, destacando Smile de la californiana Katy Perry, su 6º álbum de estudio que, lejos que acompañar el furor estival, ha quedado olvidado por los ránquines musicales de 2020, pese a su llamada a sonreír…
La cuesta de septiembre se hizo notar en todos los aspectos. La música no sería una excepción.
OCTUBRE
Curioso es el ejemplo del cantante y vocalista de la banda de rock estadounidense Bon Jovi, cuya previsión de lanzamiento de su 15º disco se situaba entre el mes de mayo, pero por imperativos pandémicos evidentes se retrasó hasta octubre. Decimos que se trata de un caso especialmente reseñable por el título de este álbum: 2020. Como el propio Jon Bon Jovi declaró en una entrevista, el año que recientemente dejamos atrás ha sido un año peculiar, extraño y clave – ya podemos afirmarlo – para la evolución social en todo el mundo. Destacan las protestas callejeras en Estados Unidos con motivo del movimiento Black Lives Matter tras la muerte de George Floyd y, hace poco más de dos meses, la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones presidenciales del 3 de noviembre. Todos estos acontecimientos, que con toda certeza han hecho virar el rumbo de un país tan grande como es USA, se encuentran recogidos en la canción American Reckoning.
El 30 del mismo mes, Ariana Grande publicaba Positions, el 6º disco en solitario de la joven. La crítica no se mostró especialmente sorprendida con un álbum que, según apuntaron algunos críticos, no aportaba ninguna novedad al registro de Grande, como también se dijo de Katy Perry. Parece que no fue un buen año para las estadounidenses...
NOVIEMBRE
El 27 de noviembre veía la luz Plastic Hearts de Miley Cyrus, y lo hacía en un contexto delicado ya que la que fuera alguna vez Hanna Montana se había sometido poco antes de la publicación de este 7º disco a una cirugía de urgencia por amigdalitis de las cuerdas vocales, el músculo más valioso de un cantante. La natural de Tennessee se recuperaba a finales de año en el hospital para con volver a los escenarios con más fuerza en mayo de 2021.
DICIEMBRE
Escasos 5 meses después de la salida de Folklore, Taylor Swift sorprendía de nuevo al mundo con un segundo disco en el mismo año, "el disco hermano de Folklore" según la cantautora anunciaba a través de Twitter. Y quizá incluso mejor...
I’m elated to tell you that my 9th studio album, and folklore’s sister record, will be out tonight at midnight eastern. It’s called evermore.
— Taylor Swift (@taylorswift13) December 10, 2020
📷: Beth Garrabrant pic.twitter.com/xdej7AzJRW
De esta forma, Taylor Swift se despedía de 2020, un año de balance negativo, pero que la cantante ha sabido a aprovechar a la vez que ha ayudado a sus seguidores a evadirse con sus letras y ritmos tan intimistas.
Casi con toda certeza, cualquier persona que haya vivido 2020 se quedaría corta al describir este año tan extraño. Como cantaba Fito y Fitipaldis: «No digo diferente, digo raro». Este parece ser el regusto que todos los mortales compartimos de los 365 días que ya dejamos atrás, con la alegría de saber que se abren ante nosotros doce nuevos meses de retorno progresivo a la verdadera normalidad, esa en que disfrutábamos antes del 13 de marzo.
Independientemente del país, sexo o ideología política, el Covid-19 ha demostrado ser un virus que no entiende de etiquetas. Hasta la música en España ha experimentado un cambio de 360º tras la pandemia. Cambios todos positivos, afortunadamente. La calidad de los singles españoles es plausible por su acercamiento a la realidad social del país y la de los nuevos discos internacionales irreprochable por la originalidad y el riesgo en el que se han embarcado artistas que ya eran conocidos, pero que tras 2020 amasan una legión de fieles seguidores aún mayor.
Sabemos, al menos por intuición, que 2021 superará con creces al anterior: ya estamos en pleno proceso de vacunación, pronto comenzarán a retomarse las giras musicales y la economía mundial experimentará paulatinamente una mejora. Pero lo que no está tan claro es si en términos de producción musical, este año será tan prolífico como su antecesor. ¿Supondrá la vuelta a la normalidad la sequía creativa de los artistas? Tendremos que esperar hasta 2022 para saberlo.
