Viviendo en 4K

Un recorrido digital de la Santa Misión

Por Marina López y Juan Mario Toscano

En el 4o Centenario de su creación el Señor del Gran Poder se acerca a toda Sevilla. Para ello, la Santa Misión ha cumplido un itinerario que ha llevado al cristo hasta las zonas más desfavorecidas de la capital andaluza, como es el caso de Los Pajaritos.

Su itinerario estaba formado por cinco salidas distribuidas a lo largo de los meses de octubre y noviembre. Paralelamente, se han organizado actividades como voluntariados, misas y horarios de visitas en los diferentes lugares de culto sevillanos en los que la procesión ha descansado.

El primer día fue el 16 de octubre, dándose el traslado desde la Basílica de Jesús del Gran Poder a la Parroquia Blanca Paloma, en Los Pajaritos. Este día fue quizás el más emotivo y significativo: con una pandemia mundial y dos Semanas Santas canceladas, los devotos esperaban y recibían este momento con una emoción y alegría difícil de explicar con palabras. Una nube de móviles graban vídeos y hacen fotos sin parar. Se nota la fiebre de la tecnología.

El siguiente sábado, 23 de octubre, sucedió la segunda salida. Esta vez la procesión tendría lugar en el propio barrio y el traslado sería desde la Parroquia Blanca Paloma hasta Nuestra Señora de la Candelaria. Este día dejó imágenes muy esperadas, el Señor visitando un barrio que lo aguardaba con ilusión. La diversidad y la compenetración entre hermandades fue una estampa para la memoria.

La siguiente salida estuvo acompañada de un día pasado por agua. A las 16:00 salía la Cruz de Guía con paso temeroso, los devotos expectantes a que saliera su Señor y los móviles preparados para hacer videollamadas a aquellos que no podrían disfrutar de tal espectáculo. Al poco de salir, las primeras gotas les sorprendieron y con la mirada puesta en el cielo, ocurrió lo que nadie quería: la Cruz de Guía se retira y la procesión se resguarda en el templo. Las miradas que estaban fijadas en el cielo, ahora están en Twitter pendientes de ver qué pasa. Tras dos horas de espera, el traslado se acaba dando, aunque no sigue el itinerario esperado.

El viernes 5 de noviembre se dio el traslado desde la Parroquia Santa Teresa hasta la Catedral. Como no podría ser de otra forma, el recorrido que seguiría no solo fue publicado en los periódicos y las redes sociales, sino que también se creó un seguimiento a tiempo real para que los más devotos pudieran seguir la imagen allá donde esta fuere sin perder detalle alguno. Ubicación a tiempo directo de prácticamente todo lo que se mueva, ¿nuevo capítulo de Black Mirror?

Hoy, 5 de noviembre, se puede realizar el seguimiento del traslado hasta la SMPI Catedral de Sevilla mediante un sistema de geolocalización. El recorrido y toda la información en el siguiente enlace.#SantaMision2021 https://t.co/7SB07HDtR2
— Hermandad Gran Poder (@HdadGranPoder) November 5, 2021

Llegó la última salida y el fin del recorrido del Señor de Sevilla. Si la presencia de dispositivos móviles era más que abundante durante otros días, en esta ocasión la avenida de la Constitución y la calle Tetuán se llenaron de curiosos y piadosos buscando la perspectiva ideal para que sus stories de Instagram reflejaran aquel momento tan histórico. Para una persona de estatura media, ver al cristo se convierte en una misión prácticamente imposible: pantallas de los dispositivos más novedosos y cámaras de aquellos que buscaban inmortalizar el momento con la mayor calidad posible.

El aplauso de toda Sevilla a tí Señor.@HdadGranPoder #SantaMision2021 pic.twitter.com/3DRAgqZd1o
— A.Zambrano (@Devivir) November 6, 2021

Twitter se inundó de vídeos realizados por todos los que salieron a las calles a ver a su Señor. El recorrido podría haberse realizado con el hashtag #SantaMision2021 donde los fieles compartieron lo que sus ojos ya estaban viendo.

"Quién reza cantando, reza dos veces"
Solo dale al play y escucha 👇🏼#SantaMisión2021
🎥 @amuruve pic.twitter.com/WoF6VPErZj
— Estrella Carreño (@EstrellaCarre) November 5, 2021

Es curioso observar cómo los hábitos de nuestras vidas han cambiado. Si antes el silencio de las procesiones lo rompía el llanto de un niño, ahora ese silencio está acompañado del sonido de los obturadores o de los stories de Instagram de algún despistado que se ha dejado el sonido puesto. Según una estadística de Statista, los españoles pasamos casi dos horas en WhatsApp al día, más de una en Instagram y cerca de una hora en Twitter. Si hacemos cálculos exactos de esta investigación, pasamos prácticamente la quinta parte de nuestros días conectados. Si miramos tanto a la pantalla, si nos centramos en fotografiar y postear un momento, ¿qué estamos realmente viviendo?