jueves. 03.10.2024

Sus ojos desprenden un brillo provocado por la luz que emite la videollamada, Ignacio Cunillé nos recibe desde su ordenador en lo que parece su oficina en casa, en el barrio del Porvenir. Una habitación aparentemente pequeña con paredes blancas, en las que destaca un armario empotrado de un color marrón claro y un cuadro de un paisaje marino.
Nació en Madrid en 1965, estudió Ciencias empresariales en la universidad Autónoma, en 1983, más tarde haría un máster en finanzas en la CEF de Madrid. Empezó en el mundo de las empresas de gran consumo de la mano de marcas como Johnnie Walker o J&B, en el departamento de “reporting y planificación” y en el de ventas. Cuatro años más tarde se le ofreció, desde la empresa, un puesto en Estados Unidos que no dudó en aceptar. Esta nueva oportunidad le permitió vivir en este país por cinco años. Cuando se produjo una reestructuración decidió probar suerte con el grupo Pascual.
Después de casi una década, Ignacio Cunillé decidió dar un giro a su carrera profesional y dejar el mundo de la empresa Pascual, el mundo de los yogures y los lácteos, para dedicarse a lo que realmente le inspiraba, la cerveza. Un espacio mucho más creativo y excitante. Hoy, en el puesto de director territorial de ventas de Andalucía en Cruzcampo mira con ojos de preocupación al sector de la hostelería, uno de los más afectados por esta pandemia mundial.

Con nueve años en la empresa se ha dado cuenta de la importancia que hay que darle a la conexión entre la empresa y la gente, especialmente para un sector donde las relaciones sociales son cruciales. Una conexión que ha permitido a la empresa mantener su triángulo dorado entre Sevilla, Huelva y Cádiz con una impresionante cuota de consumo del 87% por ciento.

Miguel Úbeda recibe el premio <<Talento Gastro>> de parte de Ignacio Cunillé - R. DOBLADO / V. GÓMEZ, ABC Sevilla 2018

Miguel Úbeda recibe el premio <<Talento Gastro>> de parte de Ignacio Cunillé - R. DOBLADO / V. GÓMEZ, ABC Sevilla 2018

Uno de los principales objetivos que tiene Cruzcampo como marca es que lleguemos a asociar Andalucía, el sur y la cerveza Cruzcampo, que la gente cuando piense en la marca no solo la identifique como una cerveza más, sino que sea capaz de crear conexiones y poder llegar a relacionarlas con momentos de su vida; épocas felices de celebración, pero del día a día, no tienen por qué ser asociada a grandes eventos como bodas. Debe ser una cerveza para el pueblo andaluz, el obrero, el humilde. “Nosotros intentamos que represente la marca de los andaluces, una marca que todos sientan como suya, que sientan orgullo de ella, que sea capaz de representar la humildad; una cerveza que esté con las personas más sencillas. Con la gente que no entiende de clases sociales. Conseguir que todos la asocien con volver a casa”, explica. Con esa idea es como nació una cerveza por y para los andaluces. Esta cercanía que quiere mantener la compañía con la gente es lo que más le motiva, la necesidad de estar en contacto con la gente en el día a día. Esto marca la diferencia entre trabajar con una empresa cualquiera, mucho más fría y alejada de la cotidianidad y trabajar con Cruzcampo.

"Nosotros intentamos que Cruzcampo represente la marca de los andaluces, una marca que todos sientan como suya, que sientan orgullo de ella"

 

Ignacio Cunille, Robert Tetas y Camila Ferraro Premios Gurme./ RAÚL DOBLADO, ABC Sevilla 2019

Ignacio Cunillé, Robert Tetas y Camila Ferraro Premios Gurme./ RAÚL DOBLADO, ABC Sevilla 2019

Y qué mejor momento que este para demostrar a los andaluces que su cerveza está con ellos, sobre todo ahora, en estos momentos tan difíciles. Con la creación de campañas e iniciativas como #FuerzaBar, la empresa intenta ayudar al sector de la hostelería que está viviendo ahora una de las mayores crisis que se haya podido conocer. Estos meses encerrados han supuesto la muerte para muchos negocios, y desde Cruzcampo se está intentando evitar más bajas en este sector.

"qué mejor momento que este para demostrar a los andaluces que su cerveza está con ellos, sobre todo ahora"

Considera que es imprescindible que el sector de la hostelería haga un esfuerzo por adaptarse de la manera más rápida posible a la situación actual; para que pueda sobrevivir tiene que impulsar medidas como la creación de un sello de “establecimiento saludable”, así los clientes tendrán la seguridad de que ese bar o restaurante cumple con las medidas mínimas de higiene y de protección ante el virus.

Su objetivo es que ahora la empresa se ponga al pie del cañón con las ayudas a este sector destinando todo el dinero, que en otras circunstancias iba a ser utilizado para la publicidad, para apoyar a estos bares que llevan meses sin obtener ningún tipo de ingreso. La creación de material sanitario como mascarillas con impresoras 3D es también otras de las formas en las que Cruzcampo está ayudando al personal sanitario andaluz.

Según sus estimaciones cree que se tardará un año para volver a la situación precrisis. Por lo que mientras que estemos en esta situación “es necesario ser fuertes, ser solidarios y sobre todo tener paciencia porque esto no durará para siempre”.


"Esta pandemia nos va a enseñar como sociedad que no somos invencibles y que tenemos que estar preparados para todo tipo de situaciones"


-¿Cree que podremos sacar algo positivo de esta situación?

-Hombre, a nivel profesional nosotros nos hemos dado cuenta de que las empresas tienen que estar siempre bien organizadas tanto a nivel de recursos humanos como a nivel financiero, las empresas que estaban saneadas financieramente van a salir de esta crisis y van a seguir hacia delante, pero las que estaban ya de por sí mal financieramente van a caer y no van a ser capaces de abrir. Ya más a nivel personal considero que esta pandemia nos va a enseñar como sociedad que no somos invencibles y que tenemos que estar preparados para todo tipo de situaciones, es fundamental cambiar la mentalidad de vivir tanto en el día a día y adoptar una visión más a futuro.